LA RADIACIÓN NO TIENE NACIONALIDAD
NI NECESITA PASAPORTES.
María Zajárova: Es muy preocupante la creciente tensión en torno a
la central nuclear de Zaporiyia.
Los neonazis ucranianos utilizan las armas de la OTAN para
disparar contra sus instalaciones, incluidas aquellas cuya destrucción podría tener consecuencias imprevisibles.
Los representantes de los regímenes liberales occidentales ni siquiera se preguntan si Ucrania está utilizando las armas suministradas para atacar la planta nuclear y ni siquiera razonan que, si ocurre una tragedia, es simplemente porque se usarán sus municiones.
Entiendo que la UE ahora está ocupada con el tema "más importante": dar o no visas a los ciudadanos de Rusia.
Pero la radiación no tiene pasaportes. No necesita visas para cruzar las fronteras. Por alguna razón desconocida, a la UE no le preocupa en absoluto esta cuestión.
