2022-06-20 20:13:27
¿ EVANGELIZAR Y PROFETIZAR DESDE EL PRIVILEGIO ?A la luz de los acontecimientos actuales en
COLOMBIA, me vienen a colación mis hermanos de la tan adolorida patria de mis entrañas, mi amada Venezuela.
Cuanto dolor y sufrimiento han corrido por tus mejillas (dos décadas de copiosas lágrimas), Oh tierra de gracias y maravillas como dijese la Santísima Virgen María a su amada hija María Beanchini en Finca Betania (Maracay). Pero maravillas y gracias que vendrían como el fruto de la crucifixión de toda una nación.
Venezuela, un pueblo acrisolado en el tormento del exilio y crucificado en una avasallante ruina social, política y económica (hospitales y atención médica, servicios y vías públicas, infraestructuras, industrias, comercios, universidades, moneda, índices y variables económicas, etc), como también la dolorosa separación (en muchos casos hasta irreversible) de millones de familias, hijo(a)s que nunca más volvieron a ver a sus padres, matrimonios desechos y destruidos, abuelos y padres con el corazón destrozado que descienden al sepulcro con la última imagen de sus hijos captada desde la pantalla de un dispositivo móvil.
Pero aún así, allí sigue en pie todo un resto fiel y pueblo de María Santísima de Coromoto, que al igual que Juan, Magdalena y María de Cleofás, son héroes ante la Cruz.
Estos héroes cocidos a fuego lento e intenso en el martirio del dolor, son
VERDADEROS PROFETAS DEL MENSAJE DE LA CRUZ, pues su testimonio no se irradia desde el privilegio y la comodidad de un país funcional, sino desafiante, afuncional y disfuncional. Han sorteado los escollos de la senda hacia el calvario. Son hijos y profetas forjados en el calvario.
Por tanto, su palabra y mensaje arden en la Cruz de Cristo.
Cabe aquí la consigna del gran profeta de María Santísima, San Luis María Grignon de Montfort (TVD 59):
"Por último, sabemos que serán verdaderos discípulos de Jesucristo. Caminarán sobre las huellas de su pobreza, humildad, desprecio de lo mundano y caridad evangélica, y enseñarán la senda estrecha de Dios en la pura verdad, conforme al santo Evangelio y no a los códigos mundanos, sin inquietarse por nada ni hacer acepción de personas; sin perdonar, ni escuchar, ni temer a ningún mortal por poderoso que sea. Llevarán en la boca la espada de dos filos de la palabra de Dios (Heb 4,12); sobre sus hombros, el estandarte ensangrentado de la cruz; en la mano derecha, el crucifijo; el rosario en la izquierda; los sagrados nombres de Jesús y de María en el corazón, y en toda su conducta la modestia y mortificación de Jesucristo"LA CRUZ QUE CRUCIFICA A UNA NACIÓN, FORJA PROFETAS Y HÉROES EN LA FE, PREPARANDOLES COMO LOS VERDADEROS APÓSTOLES DEL FIN DE LOS TIEMPOS.
Paz y bien.-
Pablo Vivas
Predicador Católico
Pd: Escribiendo, mis dedos se deslizaron sobre cada línea no sin lágrimas por mi amado pueblo.
167 viewsedited 17:13