MARÍA DESATADORA DE NUDOS
Amada Virgen María, llenos de Confianza nos dirigimos hacia ti, que desde la eternidad moras en el corazón de Nuestro Padre Celestial.
Tú conoces cuantas veces tus hijos caemos en enredos, tanto en la historia de los pueblos, como en nuestra propia vida.
Cuantas veces nos parece no tener salida !
Por eso venimos a ti: Tú puedes desatar los nudos, pues conoces caminos para llegar a los corazones que nosotros ignoramos.
Así te traemos con fe nuestras intenciones
( se pone la intensión )
estando seguros de ser escuchados,
Pues tú eres nuestra Madre.
Amén