Cuatro de los hombres fueron ejecutados en la silla eléctrica de Virginia el 2 de febrero de 1951. Tres días después, los tres restantes también fueron electrocutados. En aquella época, la violación era un crimen que se castigaba con la muerte. “Todos merecemos un sistema de justicia penal que sea justo, equitativo y que cumpla su papel, sin importar quién eres o cómo te ves”, dijo el gobernador de Virginia, Ralph Northam. Los familiares de los 7 hombres dijeron que sus parientes fueron interrogados bajo presión, sin la presencia de un abogado, y que sus confesiones fueron coaccionadas bajo la amenaza de sufrir violencia. Este martes, Northam se reunió con los descendientes de los hombres y firmó los indultos de los “Siete de Martinsville”, como se les llamó en aquella época a los ejecutados. https://cnn.it/3zCUbON
