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Quiero contar algo tan sencillo pero tan impactante de lo cual | ✨ El blog de Estry ✨

Quiero contar algo tan sencillo pero tan impactante de lo cual pude ser testigo hoy. Volviendo de la Iglesia mi mamá y yo tomamos el P5, y desde que entramos escuchamos a una mujer dentro predicando el evangelio en alta voz. La reacción de los que estaban allí era evidente: un rechazo a la Palabra, desprecio y burlas.

Una de las cosas que más me tocó fue cuando esa mujer dijo: “La paga del pecado es muerte. No es la sangre del chivo la que te limpia, es la sangre de Cristo”. Imagínense como se tomaron eso las personas. Se reían de ella, hacían comentarios ofensivos, y los niños (grandecitos ya) que estaban sentados al lado de ella cantaban altísimo riéndose de ella.

Les voy a decir algo. Lo único que pude hace fue llorar entre esa multitud. Ver el grandísimo rechazo al Evangelio me dolió, ver como se burlaban de esa mujer que predicaba la VERDAD me dolió, y me recordó cómo también se burlaron de Jesús y de todos sus siervos cuando predicaban de esta forma. Yo antes creía que predicar en una guagua a alta voz era extremista, pero le pido perdón a Dios, porque predicar de esa forma no es extremista, es VALIENTE, es NECESARIO.

Las personas necesitan escuchar la VERDAD y la Palabra de Dios siempre provoca ese efecto de molestia porque es VERDAD. Yo quiero ser como esa mujer, y sé que fue Dios a través de ella, pero yo quiero ser así, predicar el Evangelio sin temor a lo que digan, porque cuando tengan que rendir cuentas delante de Dios no podrán decir nada, porque esa “loca de la guagua” les advirtió, les predicó, pero ellos la rechazaron como hace miles de años la humanidad rechaza a Cristo.

Tú cristiano, si alguna vez despreciaste a algún enviado del Señor o te burlaste de él por predicar de esta manera, pídele perdón a Dios, porque hoy son pocos los valientes que se levantan a cumplir con el mandato de Cristo de predicar a todos, mientras que otros que dicen ser cristianos no le predican ni a quienes viven con ellos. Y recuerda que la Palabra de la cruz es locura para los que se pierden, pero a los que se salvan es PODER DE DIOS (1ª Corintios 1:18).

Estry EM
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