Veamos un ejemplo de cada una de estas causas del éxito del cr | Fortalece tu fe Católica

Veamos un ejemplo de cada una de estas causas del éxito del cristianismo:

El Martirio:
Desde Niño se educaban en esta actitud de martirio. Es alentador escuchar historias como la de Santa Eulalia, que en la ciudad augusta, ciudad de Mérida actualmente en España, se entregó voluntariamente a las autoridades, aunque sus padre habían huido al campo para rehuir la persecución, ella sin embargo fue directamente ante las autoridades locales para denunciar la persecución que en todo el imperio Romano se había desencadenado sobre todo en una persecución muy violenta que fue la de Decio, en el 301 y 304.

Miles de cristianos fueron sacrificados a través de torturas tremendas, tanto como con animales, desmembramientos de su cuerpo.

Santa Eulalia, prefirió entregarse para denunciar esta crueldad y recibió como respuesta, un puñado de incienso invitándola a que lo ofreciese a los falsos dioses. Ella dio un manotazo a ese puñado de incienso y dijo que jamás adoraría falsos dioses, lo cual le supuso una tortura muy cruel que fue que su cuerpo fue torturado con hierros candentes y finalmente martirizada, asesinada.

La Actitud de los cristianos ante las enfermedades:

Galeno en la epidemia que se desató en la ciudad de Roma e el año 165, ¿saben lo que hizo? Pues huyó dejó a sus enfermos, dejo su profesión por miedo a ser contagiado.

¿Quien se quedaba? Lo dijimos en el capítulo 2, LOS CRISTIANOS, Que atendían nos solo a sus enfermos, sino incluso también, a los que les perseguían anteriormente.

Su actitud moral, respecto a la familia, a la sexualidad, a la mujer y los niños:

En concreto en relación a la mujer tomemos el siguiente ejemplo de un divulgador científico llamado Isaac Asimov, que a finales del siglo XX fue muy conocido el era agnóstico (ateo) y el reconocía que la actitud de los cristianos con la mujer le granjeó gran aprecio entre este grupo de la humanidad porque mientras en otros cultos, (los mistericos) la mujer no era aceptada sin embargo en el cristianismo encontró un lugar de privilegio. Y al hacerse cristiana eran las que luego transmitían la misma fe a los niños, tanto a los propios como también a los hijos de los paganos que ellas muchas veces tenían que cuidar como matronas y nodrizas, como cuidadoras simplemente y esto fue una pieza clave, dice este divulgador científico agnóstico Isaac Asimov, para la divulgación y extensión del cristianismo.