Estas son las colonias de hongos que se forman sobre los cultivos en placas petri. Son plataformas redondas donde se deposita una base que suele ser agar agar mezclada con sustancias nutritivas para los microorganismos.
Sobre ellas se cultiva uno concreto o bien se siembra desde el ambiente o tocando con algún objeto.
En un par de horas con calor y humedad crecen incluso a partir de una sola partícula.
Pues bien, eso es exactamente lo que ocurre sobre una mascarilla utilizada una sola mañana.
Sembrada cada vez que la tocamos o dejamos en cualquier superficie, colocado el sembrado frente a boca y nariz, las condiciones de calor, humedad son óptimas para que se reproduzcan hongos y bacterias de todo tipo. Después, las volvemos a inhalar introduciendo en el tracto respiratorio superior especies que no deberían estar allí. Este proceso continuado durante días, meses y años causa graves desequilibrios en la microbiota natural que puede traspasarse a través de besos. Los médicos no estudian esto. Un aullido
