*VIDA DE SAN JOSÉ* *Hna. María Cecilia Baij* *Entrega 258* | 💐Libros católicos grabados💐 Apóstoles de Su Amor

*VIDA DE SAN JOSÉ*
*Hna. María Cecilia Baij*

*Entrega 258*

*LIBRO III*

*DESDE EGIPTO A NAZARETH HASTA LA PÉRDIDA DE JESÚS*

*CAPÍTULO VII*

*INCERTIDUMBRE ACERCA DE LA META, ¿JUDEA O GALILEA?*( Continuación)


Sin embargo, este consuelo de nuestro José fue amargado, porque al detenerse para pasar la noche en un lugar cercano a Jerusalén oyó decir que estaba reinando Arquelao y que era una persona muy terrible. Temía mucho y se entristeció, pensando que este podría perseguir a su Jesús, así como había hecho Herodes. No quería demostrar su pena a la Divina Madre de modo que no se afligiese Ella también, ni tampoco a su Jesús, por lo cual el Santo se quedaba todo triste y afligido. Todo ya lo sabía la Santísima Virgen, y no se demoró mucho en consolar a su afligido esposo, suplicando también a su Jesús para que lo quisiera consolar, asegurándole que no habría nada en contra de Él. Jesús le hablo junto con su Santa Madre, y lo consolaron animándolo para que no tuviera temor alguno porque todo habría acontecido según el beneplácito del Padre Divino y nada más, y que, habiéndolo el Padre Divino llamado de su exilio, no debían temer nada en contra.
Mucho se consoló el afligido José por las palabras de su amado Jesús y de su esposa, y se le quitó todo temor después de haber sido tranquilizado por las palabras de los mismos, por lo cual muy feliz y contento siguió su viaje. Se aconsejaron entre sí de como tenían que hacer el resto del camino y si debían ir a visitar el Templo de Jerusalén, como también el lugar de la cueva de Belén, de lo cual nuestro José tenía un gran deseo, así como también la Divina Madre, para poder adorar el lugar donde había nacido su Divino Hijo, teniendo una devoción particular a ese lugar.
Aunque nuestro José ordenara todas las cosas como jefe de la Sagrada Familia, a pesar de eso se sometía en todo al Divino Niño y a su Santa Madre, de modo que en todas las cosas se cumpliera la Divina Voluntad, que ellos ya la conocían perfectamente. Se estableció ir a visitar el sagrado Templo de Jerusalén para adorar allí al Padre Divino y agradecerle de todos los beneficios que les había hecho en ese viaje, y que al llamarlos de nuevo a su patria los había hecho llegar sanos y salvos, y luego ir también a Belén para adorar el Lugar del Nacimiento.
( Continuará)

*Apóstoles de Su Amor*