2021-07-30 18:59:01
Plantas incompatibles Hace tiempo, conseguimos una palmera para la azotea de nuestra casa. Era una planta de unos centímetros. Ahora tiene más de 3 metros de alto, y casi a diario tiene hojas nuevas . Estamos muy contentos con ella. Al lado de la palmera, pusimos una enredadera, pero murió. Compramos varios tipos de plantas. Todas morían.
Así que fui a un vivero, y le dije a la dependiente:
“Mira, quiero una enredadera que sea muy dura. Que soporte temperaturas altas y bajas, lluvia, sol y hasta nieve o granice (en Canarias rara vez sucede esto último)”. La mujer me respondió sin dudar:
“Jazmín. Es muy fuerte, tiene flores y huele bien”. Genial, me dije.
El jazmín es, sin duda, un tipo duro. No murió. Incluso llegó a enredarse en una celosía que tenía colocada. Poco más. Ni crecía, ni le salían flores. Así que un día, decidí darle una última oportunidad: lo cambié de sitio. A unos 2 metros de la palmera, al otro lado de la celosía. Desenredé las ramas con cuidado, le quité las hojas muertas, volví a enredar sus ramas, y la regué con mucho mimo .
Los primeros días no hubo diferencia, pero pasadas unas dos semanas, la planta revivió. Comenzaron a salir un montón de hojitas nuevas . Un mes después llamé a mi mujer emocionado.
“¡Mira! ¡Van a salir 4 flores!” ¿Qué había pasado? Parece ser que el jazmín (y las otras plantas) no podían estar cerca de la palmera. Creo que por culpa de unos bichitos (pulgones), que pasaban de una planta a la otra.
De forma parecida, a veces, hay amigos que entorpecen nuestro desarrollo. Quizá no lleguemos a morirnos, pero, para poder crecer y florecer, debemos alejarnos, aunque sea un par de metros.
¿Te está pasando esto a ti? ¿Deberías tomar distancia con alguna “palmera”?
207 viewsJaír Amores, 15:59